viernes, 10 de octubre de 2014

Secretos ó mentiras en pareja







Como terapeuta de pareja muchas veces me hacen una pregunta: ¿Es
bueno que la pareja tenga secretos? Y siempre les contesto lo mismo: no es
necesario contárselo todo, pero todo lo que se cuente debe ser verdad. Una cosa
son los secretos, que sería toda esa información referente a hechos,
sentimientos o pensamientos que forman parte de cada una de las personas como
seres individuales y que no se quieren compartir con nadie más, ni siquiera con
la pareja. Y dos cosas claramente distintas son la omisión de información de
manera intencionada y las mentiras, que en definitiva es lo que incide directamente
sobre la confianza de la pareja.
Si seguimos esta dinámica, la comunicación siempre será positiva y
las raíces de la relación estarán más nutridas, cuando sabemos que no hay
mentiras ni engaños por miedo a no enfrentarnos con el otro, que tenemos esa
confianza de poder decirnos cualquier cosa sin ser juzgados.
Para ello hay que tener clara la diferencia en el mundo de la
pareja entre PRIVACIDAD e INTIMIDAD. La intimidad es ese espacio que
compartimos los dos como unidad y privacidad es el aspecto más individual y
personal de cada miembro de la pareja por sí solo. ¿Qué significa esto? Pues
que si tengo la sensación de renunciar a mi mismo por el hecho de formar una
pareja, más tarde o más temprano esto se va a volver en contra del vínculo. Es
por ello que hay que conservar esa parte nuestra que no tiene por qué ser
compartida.
Es cierto que hay mentiras que cumplen una función social y muchas
veces ciertas mentiras piadosas evitan un mal o un conflicto que podría
desencadenarse en caso de decir realmente lo que se piensa –como el caso de
contar vida y obra de nuestras relaciones sexuales anteriores-. Ese otro tipo
de información que sabemos que, si la revelamos, podría tener un impacto
impredecible (o en ciertos casos, predecible) en nuestro presente y en nuestro
futuro de pareja.
Porque, como decía Víctor Hugo, “aquel que dice cuánto piensa, piensa muy poco lo que dice”.